Autor: Paolo Giordano
Sinopsis:
Existen entre los números primos algunos aún más especiales. Son aquellos que los matemáticos llaman primos gemelos, pues entre ellos se interpone siempre un número par. Así, números como el 11 y el 13, el 17 y el 19, o el 41 y el 43, permanecen próximos, pero sin llegar a tocarse nunca. Esta verdad matemática es la hermosa metáfora que el autor ha escogido para narrar la conmovedora historia de Alice y Mattia, dos seres cuyas vidas han quedado condicionadas por las consecuencias irreversibles de sendos episodios ocurridos en su niñez. Desde la adolescencia hasta bien entrada la edad adulta, y pese a la fuerte atracción que indudablemente los une, la vida erigirá entre ellos barreras invisibles que pondrán a prueba la solidez de su relación.
Opinión:
Esta historia simplemente puedo describirla como un grito de soledad, un viaje profundo, desgarrador y a la vez reflexivo sobre la vida, la soledad, los miedos, las palabras no dichas y las marcas que deja el pasado en nuestras vidas, a veces, imposibles de superar.
Alice y Mattia simplemente son personajes que se nos presentan en su infancia hasta su adultez, desde los dos primeros capítulos el libro nos enfrente a un evento traumático que desembocara el desarrollo de nuestros personajes; vemos a través de sus narraciones como este evento marcara su vida por siempre. El libro en verdad es crudo, muy lejano al romanticismo o al amor adolecente; cuando nuestros protagonistas se encuentran no se choca su atracción, colacionan sus problemas, sus vacíos y su soledad desencadenado una confusión donde ninguno de los dos está seguro de dar un paso hacia el otro.
Creo que esa es mi parte favorita de la historia que no fuerce una relación romántica entre los personajes, que pese a su atracción por el otro; no se resta importancia a sus vidas individuales o a sus problemas. Porque este es otro atractivo de la historia el cómo presenta temáticas fuertes como el cutting, la anorexia y el duelo en realidad permite entender como nuestros personajes guardan tanto dolor ellos que su único refugio seguro es la soledad.
El libro transcurre en una batalla entre la soledad y las personas, en momentos como intentas alejarla o desterrarla de tu vida; como Alice encajando con amigos falsos, forzándote a encajar en las expectativas de sus padre o incluso intentando enamorarte de alguien. A su vez en contra posición Mattia quien se aferra a la soledad a tal punto que nadie puede entrar en su espacio, alejando a cualquiera que intente acercarse y completamente ajeno a los sentimientos de los demás.
Sin duda fue una lectura que disfrute al máximo, lo único que no me gusto fue que por momento la situaciones de los personajes se hicieron un poco tediosas, así como parte que fueron innecesarias en la trama sin cierre alguno, como Alice y la hermana de Mattia. En cuanto al final, a mí me gusto; pero soy consciente que no es un libro para todos. Esta lectura es muy desgarrada, cruda, desesperante por momento y está llena de vulnerabilidad, no es un libro que te deje con una sonrisa, pero si te deja una sensación de soledad tal cual como a sus protagonistas.